Congelado en el tiempo: la ciencia detrás de la criogenia

¿Alguna vez has oído hablar de la criogenia? Es una ciencia real que se usa hoy en día, la criogenia es el estudio de temperaturas extremadamente bajas y sus efectos en diferentes materiales, incluido el tejido vivo. Es un campo emocionante que está abriendo nuevas posibilidades para la medicina, la exploración espacial y más. 

El término “criogenia” proviene de las palabras griegas kryos, que significa “frío”, y genes, que significa “nacido de”. En esencia, la criogenia es la ciencia de las cosas que nacen del frío. El ejemplo más famoso de criogenia es probablemente la crioconservación, el proceso de conservación de tejidos vivos u organismos completos a temperaturas extremadamente bajas.

La crioconservación es un proceso que consiste en congelar tejidos vivos u organismos completos a temperaturas muy bajas. A menudo se usa para conservar esperma, óvulos y embriones para tratamientos de fertilidad, así como para conservar tejidos y órganos para cirugía de trasplante. El proceso de criopreservación no es tan simple como meter algo en un congelador, si congelamos tejido vivo sin tomar ninguna precaución, los cristales de hielo que se forman podrían dañar las células y los tejidos, causando un daño irreparable. En cambio, la crioconservación implica un enfriamiento y calentamiento cuidadosamente controlados, así como el uso de productos químicos especiales para proteger las células y los tejidos del daño.

Una vez que el tejido u organismo se ha congelado, se puede almacenar durante años o incluso décadas. Cuando llega el momento de utilizar el tejido o el organismo, se puede descongelar y devolverle la vida. Si bien la criopreservación sigue siendo un campo relativamente nuevo, ya se ha utilizado con éxito para preservar muchos tipos diferentes de seres vivos.

Una aplicación particularmente interesante de la criogenia se encuentra en el campo de la superconductividad. Los superconductores son materiales que pueden conducir electricidad sin resistencia cuando se enfrían a temperaturas extremadamente bajas. Esto tiene enormes implicaciones para todo, desde el transporte (imagine trenes que levitan sobre campos magnéticos) hasta la producción de energía (los generadores superconductores podrían ser más eficientes y menos derrochadores que los generadores tradicionales).

¡Veamos el siguiente video y adentremonos mas en la ciencia detrás de la criogenia!